viernes, 31 de mayo de 2013

.... Sobre los " pecho lata ". 

Recientemente sufrí la agresión verbal de un Pecho lata, individuo inflado artificialmente y aficionado a ir por la calle con camisa estrecha y un forro de calcetines en la entrepierna. Creo que con esta definición se harán una idea del tamaño de este personaje. Así fue, yo esperaba en la cola del banco para mesa y se me planta delante este armario empotrado como si tal cosa. Yo, en proporción, no dispongo de esos descomunales músculos. Aún así desde pequeño me enseñaron a respetar a todo el mundo sin tenerle miedo a nadie. Evidentemente a este anabolizado caminante nadie debió enseñarle lo de la educación y el respeto. Imagino que no está acostumbrado a que le llamen la atención, de hecho yo no suelo hacerlo pero no me gustó su gesto de colarse arrogantemente argumentando tan sólo una enorme espalda y un horrible garabato desde la manga de la camisa hasta los dedos de las manos. 
    Educadamente le dije : " perdone señor, la cola termina allí cerca de la puerta donde está la señora de blusa azul que usted medio empujó para llegar hasta aquí. ". Se dio la vuelta y me lanzó una especie de amenaza visual o maldición azteca con la mirada. Se volvió a girar tranquilo, entonces volví a repetirle lo mismo y me ignoró por completo. Insistí varias veces sin resultado hasta que le dije : " está usted sordo o qué?. En ese momento el vigilante se acercó e inexplicablemente me llamó la atención a mí. Desde esa descomunal caja de pecho frente a mí se escapó una ruidosa e intencionada risa. 

     Qué impotencia !!!!. Finalmente le tocaba ir a mesa y como un pecho lata no camina sino desfila, decidí adelantarlo con la agilidad que me caracteriza y por la izquierda como manda la ley. Me lancé hacia aquella incómoda silla colocándome comodamente. Giré mi cabeza hacia él y le lancé un cariñoso bes. Entró en cólera y empezó a tocarse sus partes. No pude resistirme y le pregunté que por qué no la sacaba y así reirnos todos de su micro pieza. Empezó a gritar y la gente del banco lejos de asustarse no paraba de reir y reir...

     Acabó marchándose y según creo aprendiendo una gran lección.

"Por muy pequeño que seas o te creas muestrate grande ante las injusticias para entre todos cambiar  el mundo "


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